Las empresas más rentables son aquellas que dirigen sus estrategias de Marketing en la captación de nuevos clientes para después aferrarse a ellos.
Esto se debe a que el costo inicial de un nuevo cliente es mucho más alto que mantener a uno ya existente. De hecho, puede ser hasta 10 veces más barato; pues se ahorra gastos de publicidad, promoción, seguimiento y venta.
Ahora bien, ¿qué estrategia de marketing podemos implementar para fidelizar a nuestros clientes? La respuesta es la calidad.
Según Brian Tracy, la calidad es el más potente y eficaz de todas las estrategias de mercadotecnia.
Y esto se debe a que las personas están dispuestas a volver a comprar e incluso a recomendar a esa empresa que les proporciona productos y servicios de alta calidad.
De hecho, mejorar la calidad permite posicionar a tu negocio como “los mejores”, permitiendo así aumentar tus precios y margen de tu oferta, sin que exista la percepción de que eres caro.
Pero, ¿Qué es exactamente la calidad?
Según Philip Crosby, la calidad es el nivel en que tu producto hace lo que dices que hará cuando lo vendes, y continúa haciéndolo después.
Es decir, llegar a cumplir esa promesa de marca que estamos ofreciendo con tu producto o servicio.
Por ello, es importante monitorear la calidad de lo que vendes a través de encuestas y llamadas a tus clientes. Permitiéndote saber cuán valioso ha sido para ellos tu producto o servicio; y si la respuesta es negativa, preguntarles cómo mejorarlo y por supuesto implementarlo.
Por otro lado, la percepción de la calidad de una empresa, no está únicamente en tu producto o servicio; sino también en la forma en que se vende y se sirve, así como el seguimiento y las relaciones que se generen. Conoce más de Marketing Relacional AQUÍ.
Debido a esto, es importante que tú como dueño de negocio estés monitoreando de manera constante la imagen que tienen tus clientes hacia tu empresa. Así como organizar la manera de cómo deben de vender y entregar tu producto o servicio a tus consumidores.
Para finalizar, recordemos que la calidad es un proceso de mejoramiento continuo. No esperes tener el producto perfecto para lanzarlo o para arrancar tu negocio. Lo que debes de hacer, es organizar tu empresa de forma eficiente para que responda a tus clientes en caso de que no se cumpla lo que prometes (garantía). Y, aun así, la percepción de calidad será alta. Conoce más de cómo crear una garantía AQUÍ.
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